Cheese’s Art Andorra

Este restaurante es una inmersión profunda en el mundo del queso. Es un local pequeño de dos pisos. Visitamos durante el almuerzo temprano y el servicio fue rápido.

Ofrecen una amplia variedad de fondues y raclette, algunas diseñadas para compartir entre dos personas y otras para individuales. Si eres amante del queso, este es tu lugar. Lo que lo distingue es que, en algunas fondues, el recipiente es de pan de Pagés, y cuando has disfrutado todo el queso, lo rellenan con jamón, convirtiéndolo en un delicioso sándwich. Es un toque único.

La decoración es original, llena de vacas y ovejas, aunque quizás un poco abrumadora.

Una desventaja fue que nuestra mesa estaba cerca del baño, lo que, en mi opinión, es un aspecto que necesita una considerable mejora. Mientras disfrutas de tu comida, te enfrentas constantemente a la vista del inodoro, principalmente porque los clientes no cierran la puerta corredera cuando salen (entre otros motivos porque es difícil de cerrar).

Otro aspecto a mejorar es la ocasional muestra de descontento por parte de la gerencia hacia los camareros, lo que creó un ambiente desagradable en el restaurante. El servicio de los camareros fue correcto, pero la conducta de la gerencia dejó espacio para mejoras.

Step into the world of cheese at this cozy little restaurant with two floors. We visited during the early hours of the day, and the service was prompt.

The restaurant offers an extensive variety of raclette and fondue options, with some designed for sharing between two people and others for individuals. If you're a cheese lover, this is your go-to spot. What sets it apart is that for some fondues, the serving dish is made of Pagés bread, and when you've savored all the cheese, they refill it with ham, effectively turning it into a delicious sandwich. It's a unique touch.

The decor is original, featuring an abundance of cows and sheep, albeit slightly overwhelming.

One drawback was our table's proximity to the restroom, which, in my opinion, is an area that needs considerable improvement. While enjoying your meal, you're faced with a constant view of the toilet bowl, mainly because customers fail to close the sliding door when they leave (primarily because it's challenging to close).

Another aspect in need of improvement is the occasional display of displeasure from the management towards the waitstaff, which created an unpleasant atmosphere in the restaurant. The service from the waitstaff was good in our experience, but the conduct of the management left room for improvement.